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14/03/2011
Caldera de biomasa I: hazlo tú mismo
Esta es la prueba de concepto de una nueva caldera de biomasa que he construídoaprovechando una vieja estufa de leña, basada en la construída por Jose en acero inox, pero tratando de minimizar el coste.
Al final, contando vieja estufa (200€ nueva), material inox (180€), electrodos inox. de 2 mm. (30€), y accesorios; motor, vaso expansión, barómetro, llaves, tubos, etc (150€) sale en total unos 600€ que se amortizarán en dos años si se compra la madera; en menos si tenemos madera gratis.
Hay a la venta calderas de biomasa que se basan en los mismos principios, pero son mucho más complejas, caras y difíciles de mantener.
Atención: Los depósitos a presión pueden suponer un peligro para las personas, este tipo de instalaciones deben llevar los elementos de seguridad adecuados para limitar los posibles fallos que se puedan producir en su funcionamiento (válvulas de descarga automáticas, etc).
La caldera básicamente es una estufa adaptada a la que se ha añadido una caja hecha en acero inox. con cámaras de agua de 40 mm. en los laterales y 100 mm. en la zona superior,
que se ha colocado encima de una vieja caldera a la que se le ha recortado la parte trasera, donde recibe más calor.
El cajón lleva unas chapas separadas 15 mm. de la parte superior y laterales para forzar a las llamas y humos a rozar el depósito de agua, de forma que el aprovechamiento calorífico sea máximo, pero las de los laterales son opcionales.
Por otro lado utilizo la válvula de seguridad, el motor circulador, llave de llenado, vaso de expansión y demás accesorios necesarios de la caldera de gasoil roca que está al lado, a la que he añadido el termostato con dos sensores en el tubo de agua caliente y en el retorno del agua fría para controlar el funcionamiento de la bomba.
Ventajas e inconvenientes
Antes de pasar a comentaros sus detalles, vamos a analizar sus defectos y bondades.
Tras haberla probado durante tres días, sólo puedo decir que el rendimiento es sorprendente,con 5 kg. de leña calentamos todos los radiadores de la casa a 40º durante 3 horas; 100 m2 de casa unifamiliar de ladrillo con un nivel de aislamiento medio (cámara con una capa de fibra de vidrio de 2 cms).
Tengo la intención de colocarla en la cocina conectada a las tomas del radiador; de esta forma la estufa de leña no sólo calientaría la cocina (la habitación más concurrida de la casa), sino que también calentaría el resto de la casa, y con un mínimo gasto de leña.
La combustión, al reducirse el tiro natural por la salida de gases muy calientes por la chimenea, ahora con los gases a 200ºC máximo es más lenta, y como se fuerzan a los humos a subir y luego bajar dentro del hogar con las chapas, la superficie de contacto se aumenta, haciendo que la combustión sea muy eficiente; diría que se aprovecha un 80% de las calorías de la madera.
Tanta es la eficiencia que la única pega que ya había previsto es la falta de tiro hasta que la caldera coge calor; al salir los humos muy templados apenas tienen fuerza de ascensión, por lo que hay que empezar con maderas de rápida combustión (astillas de pino, piñas, etc) para evitar que el fuego se ahogue en su propio humo.
Esto se puede evitar colocando un tiro regulable en la chapa superior coincidiendo con la salida de humos, de forma que según va cogiendo calor se lo cerremos haciendo circular el fuego por los laterales.
También tiende a echar humo por la puerta si cargamos de madera cuando todavía la anterior no está en brasa, por lo que sería útil también en este caso, abriendo el paso directo al echar más madera.
El tiro regulable puede ser una varilla soldada a una chapa que deslice sobre una trampilla de 130x130 mm., con una argolla en la parte delantera de algún material no inflamable y aislante. Al estar entre la chapa superior y el depósito no cogería mucha temperatura.
Otra opción es poner una campana para la extracción de humos con un ventilador a la calle, pero como quiero colocarla en la cocina de casa (actualmente está en la zona "de pruebas"), lo próximo que haré será realizar el tiro regulable de salida directa.
Por otro lado la limpieza de hollines debe realizarse al menos anualmente; aunque como máximo tiende a ser de unos 4 mm. de espesor, tienen a acumularse en la tapa superior del fuego, que recircula los humos, por lo que hay que dejar una trampilla de acceso por la parte frontal, como la de Jose.
Construcción del cuerpo del depósito de agua
Después de analizar la caldera de Jose, llegué a la conclusión de que se podía obtener el mismo rendimiento y un ahorro de costes considerable sustituyendo el inoxidable donde no fuera necesario por otros materiales, como el acero, o aprovechando la base y puerta de una vieja estufa (que antes utilizaba un serpentín de cobre para trasladar parte del calor a otras habitaciones).
El cajón lo he construido en chapa inoxidable 304L de 3 mm. de esp.; unos 22 kg. de chapa. Para que también hiciera la función de depósito de inercia, le he dado bastante capacidad de agua; 100 mm. de altura la parte superior y 40 mm. los laterales.
Hubiera sido mejor hacer algunas partes con pliegues en vez de soldaduras, ya que se puede contratar ese mismo trabajo al que corta las chapas, pero como tampoco quería complicarlo y aparte de que me interesaba practicar la soldadura, pedí todo en piezas sueltas pequeñas y rectangulares.
He cortado la tapa de la vieja estufa en sus amarres, quedando al descubierto el serpentín de cobre, con una ligera capa de hollín, que se utilizó el pasado invierno, para coger las medidas que necesitaba para el despiece de las chapas de inox. del cajón de agua que adaptaremos encima.
Las medidas interiores del cajón serán las mismas que tiene de exterior la estufa, de forma que no quitemos sitio para hacer el fuego y meter madera; cuanto más grande nos quede, menos cargas de leña tendremos que hacer al día.
Se puede hacer a mano, pero yo he utilizado un programa de CAD para hacer los croquis de las chapas necesarias, con sus medidas. He mandado estos ficheros dxf a la empresa por email que corta las chapas por agua (hay unas cuantas en España), y en una semana las tenía en mi poder.
Qué técnica de soldadura usar
Para soldar cualquier tipo de depósito que no queremos que tenga fugas, lo mejor esusar TIG, como bien comenta Jose. Yo he utilizado soldadura por electrodo, más accesible, soldando con mucho cuidado, y a pesar de todo he tenido unas 15 fugas que hay que limpiar, y volver a tapar.
Mis consejos para soldar con electrodo son los siguientes:
- Hay que tener bastante experiencia para soldar un depósito y que quede bien. Si no la tienes, déjale el trabajo a otro.
- Limpiar bien la escoria cada vez que pares de soldar; cualquier mínimo resquicio se convertirá en un poro por donde escapará el agua.
- Suelda buenos cordones, moviendo el electrodo en zig-zag una vez por segundo para que agarre bien el caldo y no tengamos problemas de poros.
Punteado de las piezas
Para la salida de humos que atraviesa la cámara superior lo mejor era hacerla a partir de una llanta curvada de un diámetro 10 mm. más pequeño que la boca donde irá conectada la chimenea, pero como tenía que curvarlo al final y no tengo la maquinaria adecuada, compré cuatro chapas para hacerlo cuadrado, y en las esquinas que sobresalían un poco soldé unos pequeños triángulos para que no escapara el humo.
El cuadrado por donde saldrá el humo será de difícil acceso para soldar después, por lo que lo mejor es puntear las chapas en su sitio y soldarlas para que ya quede terminado.
Punteamos las chapas colocadas y luego terminamos soldando, colocando la pieza de forma que la soldadura nos quede horizontal siempre que sea posible, que es más sencillo obtener buenos resultados con electrodo.
Después, como podéis ver en las fotos, he ido colocando el resto de piezas en su sitio, punteándolas con pequeñas soldaduras para que se quedaran fijas en su sitio, y poder rectificar si había algún error. He empezado donde tiene más peso; en la parte superior, ya que es plana y puedo ir colocando piezas sin problema. A la base le punteo la parte delantera y la otra cara.
Después le voy punteando un lateral,
Y procedo con el otro y la chapa del interior del hogar,
Para terminar punteando el resto de piezas.
Preparando la vieja estufa
Luego he colocado a presentación el cajón en su sitio, para ver cuánta chapa de la estufa he de recortar para
adaptar el cajón encima del fuego, y comprobar que no hay ningún error de medida.
Marcamos con un rotulador gordo indeleble y procedemos a cortar con la amoladora y un disco de corte (de 1 mm. si es de Ø125 o de 2,5 si es de Ø178), utilizando la debida protección de seguridad; guantes, botas, gafas y cascos.
Una vez cortada éste es el aspecto que tiene; fijaos que le he quitado todas las piezas sueltas para poder cortarlo de arriba hacia abajo los laterales con comodidad.
La puerta tiene el cristal roto, que cambiaré por otro templado de la misma medida cuando la ponga en marcha definitivamente.
Y así queda colocada a presentación. Para ahorrar material he dejado ese espacio delante, pensando que si coloco una chapa de 10 o 15 mm. de espesor soldada al depósito tapando el hueco, el calor que coja ésta se trasladará por la soldadura a la chapa del depósito, por lo que nunca se calentará demasiado, y aprovecharemos más si cabe el calor de las llamas.
Terminando el depósito de la caldera de biomasa
Me gustó el resultado, así que procedí a terminar de soldar todo.
Hay que tener en cuenta que la soldadura, al contraerse, ejerce una tensión sobre el material que soldamos. Por eso es importante puntear antes de terminar de soldar. En mi caso, como se puede apreciar en la siguiente imagen, los laterales quedaron encogidos hacia el interior, aunque esto no afectaría a su colocación y se corrigió totalmente al meter presión.
La parte más complicada de soldar, y que debería haber preparado antes por el interior, son las esquinas interiores, por su difícil acceso para la limpieza en caso de que no queden bien. Aparecieron un par de poros y tuve que taparlos a base de dar capas de soldadura.
Lo siguiente era soldar los tubos de entrada y salida de agua. Había mandado el lateral izdo. al oxicorte por agua con ellos ya practicados en Ø22 mm., pero el de debajo, el de entrada de agua fría, había que desplazarlo para poder meter un tubo de forma que el agua fría entre por la parte inferior de la esquina opuesta, haciendo circular el agua por todo el depósito.
Agujero practicado con el tubo que introduciré |
El agujero lo hice con la amoladora pequeña y un disco de 1 mm., con cuidado de no pasarme mucho.
Para mejorar la distribución del agua fría, le puse un trozo de tubo soldado para dirigir el agua hacia el frontal, pero es opcional.
El trozo de tubo redirige el agua hacia un lado |
Hacemos lo mismo con la salida de agua caliente, que va en la parte superior; he utilizado el extremo de un tubo que ya tenía la rosca a 1/2 pulgada practicada.
Para comprobar la estanqueidad lo conecté a la red, pues en casa de mis padres tienen 7 bares de presión. Dado que tiene superficies planas, este depósito si se le mete mucha presión, tenderá a inflarse y romper las soldaduras, por lo que no debemos meter más de 3 bares. Después de todo va a trabajar a 1,5 bares y con 3 podemos comprobar con seguridad su estanqueidad.
En un principio no había colocado una llave de paso ni barómetro de presión, por lo que mientras aplicaba presión, iba marcando las fugas con un rotulador para su reparación.
En una de estas pruebas, olvidé la llave abierta y al rato descubrí que le había metido demasiada presión, con el peligro que conlleva, cediendo más allí donde más superficie sin soldadura había. Atención a la panza que cogió en el interior y que tuve que rectificar a base de martillazos.
La parte de atrás cogió bastante curva, llegando a aumentar 15 mm. en la parte más combada.
Para reparar las fugas hay que limpiar bien con la amoladora, eliminando gran parte de la soldadura de la zona de forma que se llegue a la raíz, y la soldadura quede bien fuerte.
Zona con fuga que ha sido limpiada para su soldadura |
Cortando una ranura que coincidiera en ambos lados,
metí una chapa a la medida, sin que sobresalga, quedando 2 mm. metida para que el cordón fuera resistente,
y luego terminé soldando un cordón que rellenara bien el hueco.
Por suerte esta soldadura quedó perfecta en ambos lados, y no hubo que tapar ningún poro. Pero el resto de poros por falta de fusión, escoria o falta de aporte de material me llevó dos tardes repararlos. Pero la experiencia que me ha aportado no tiene precio.
Una vez que hemos tapado todos los poros, conviene dejarlo con presión durante 2 horas al menos para comprobar que ninguna parte pierde agua.
Y esto es todo por ahora, pincha aquí para ver la siguiente entrada donde explico cómo he soldado las chapas del interior para redirigir los humos, colocar el depósito sobre la vieja estufa, resultados y cosas a mejorar, con comentarios de Jose Ignacio, un amigo de la calefacción por biomasa.http://miqueridopinwino.blogspot.com.es/2011/03/caldera-de-biomasa-i-hazlo-tu-mismo.html
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